El San José ha firmado una pretemporada ilusionante. Sin embargo, entre lesiones y sanciones en el estreno liguero, cuando comenzaba el fuego real, estaba en cuadro ante la visita de un desconocido Isla Cristina. No obstante, visto lo visto sobre el campo, los de Dioni Arroyo demostraron que tienen una plantilla sólida y que existe fondo de armario para afrontar la temporada con garantías.

Desde el principio, los cañameros buscaron el balón y la portería onubense, aunque una jugada desgraciada en el minuto cinco provocó un penalti del cancerbero a Luis. El futbolista del Isla Cristina falló en primera instancia, topándose con el joven guardameta, que partía como titular, pero el rechace lo acabó impulsando al fondo de las mallas.

A raíz de esa jugada, los azulinos se vinieron arriba. Diego estaba muy activo en la derecha, aunque no acababa de conectar con Sabo, que se afanaba en pedir balones a su compañero. Jurado pudo marcar, pero no acertó con el control, Andrés también buscó fortuna sin encontrarla e Iván, en un cabezazo libre de marca, mandó el balón por encima de la portería visitante.

Al descanso se llegó en desventaja, pero con la sensación de que el San José estaba en el camino correcto para darle la vuelta al marcador, lo que pareció corroborarse cuando Sabo, en el 54, devolvió las tablas al marcador.

Sin embargo, el empate, en lugar de espolear más al San José, le hizo bajar enteros. Las fuerzas se equilibraron y el cansancio o el calor hicieron mella en los de Dioni Arroyo que perdieron parte de la mordiente que tenían en la primera parte. A pesar de que fueron los que más insistentemente buscaron la meta isleña, con alguna ocasión –también hubo una muy clara de los onubenses a la contra que desbarató Sebas-, pero el marcador ya no se movería.

Como rezaban las Redes Sociales del cuadro local al finalizar el encuentro, si no se puede ganar, sumar un punto siempre es importante. La próxima semana, el conjunto azulino se verá las caras con el Chiclana.