La pasada semana, por fin, echó a rodar el balón en el Nuevo Ramos Yerga. Tras algunos días de incertidumbre, un ahora empiezo, ahora paro, a consecuencia del dichoso Covid-19, pudo llegar la ansiada regularidad en los entrenos y que el equipo empiece a coger sensaciones.

Pero como mejor se adquiere el hábito de competir es haciéndolo y, por ello, la escuadra de Nando de la Rosa, vivió ayer su primer compromiso preparatorio. Enfrente, un rival que lo será del San José durante el curso liguero, el Torreblanca, que llegaba al feudo blanquiazul no sólo exhibiendo su superior categoría, sino también su mayor rodaje, al llevar más encuentros de pretemporada a sus espaldas.

Sin embargo, el cuadro local dio la cara y sacó un valioso empate, gracias a un gol de Fernando, que carga de optimismo las pilas de la entidad de cara a llegar al 18 de octubre al máximo. Además, fueron numerosos los jugadores de la localidad, o criados en las canteras locales, los que tuvieron participación en el envite. Ya sea por necesidad, por calidad, o por ambas cosas, el sello del Rinconada lleva mucho ADN local, empezando por un entrenador de la casa y terminando por la promoción de varios chavales del Juvenil. Es, además, un equipo joven, con desparpajo, pero acumula varios futbolistas que aportan ese punto de veteranía tan necesario en una categoría tan dura como la Primera Andaluza.

El Rinconada ya conoce a sus rivales, después de que saliera adelante su propuesta de cercanía, y se verá las caras en la primera fase de la competición con Lora, Camas, Villafranco, Pilas, Bellavista, Cerro, Atlético Central, Demo y Cazalla, lo que implica un desplazamiento menos que si el criterio elegido hubiese sido el de cremallera. Un grupo difícil, igualado, pero que permite a los del Ramos Yerga salir a comerse el mundo. Ya lo decía el entrenador: “nosotros salimos en busca de la permanencia, sin hacer ruido, pero no renunciamos a nada”. Y las sensaciones son buenas, como repite el responsable de la parcela deportiva, Santi Aragón, en los entrenamientos y también con un rival de por medio.

Y eso que la situación de partida no era fácil, después de la marcha de David Cuevas, el Pichichi de los últimos años, amén de las de Joserra, Adri García o Moi –aunque este último, que sigue a prueba en el Gerena, no está ni mucho menos descartado para volver si no encuentra acomodo en el conjunto minero de Tercera división-.

El duelo ante el Torrablanca fue definitivo para que el técnico se decidiera a firmar a dos futbolistas que estaban a prueba. Así, la nómina de fichajes se amplía con Alberto de la Hera, un chaval de Cantillana que se desenvuelve en banda izquierda y que estrena categoría Senior, y Suárez, un viejo conocido de la afición local, criado en la cantera del San José y que el año pasado militó en el Demo. Aunque se trata de un futbolista polivalente, ayer Nando lo utilizó en el lateral diestro. Junto a Alberto Bella, que vuelve al club, y Jade, son las caras nuevas, amén de algunos canteranos que están ofreciendo muy buen nivel, como Junior, Saavedra o Gata, y que integran la nómina local junto a Jairo, Ávalos, Suárez, Tete, Barriga, Abel Pando, Pato, Kisko, Luis Cubero y Parque.

La idea del míster es utilizar un 4-3-3, que podría implicar alguna variante según las necesidades específicas de los partidos. Hasta tres porteros integran la meta, como son Jairo, Checa y Saavedra, que fue titular ante los torrealbenses y cuajó una muy buena actuación. Por la derecha, además del fichaje Suárez, Carlos Ávalos se ubicará en esa demarcación, mientras que en la izquierda a Óscar, otro jugador que empezó jugando más adelantado y que ha retrasado su demarcación en busca de desdoblar y los centrocampistas y abrir el campo. Junto a él, el joven De la Hera. En el eje de la zaga, Nando cuenta con Rafa Villanueva, Tete, Alberto Bella y Gata, sin cerrar la puerta a un posible regreso de Moi. En la línea medular, con mayor carácter defensivo encontramos a Barriga y Charro, mientras que también se ubican ahí los creativos Pato y Pando, completados con el flamante fichaje Jade y el canterano Junior. Y por delante, en la línea de tres, están Rioja, Kisko y Luis Cubero, junto a Fernando, que marcaba ayer, y Parque, que ya tuvo muchos minutos el año pasado. Aquí queda un hueco para completar la gran apuesta de la entidad, que no es otra que un delantero centro. En principio, es la única gestión que está abierta a candidatos, ya que otros refuerzos podrían decidirse a fichar, pero ya se ha hablado con ellos. En el caso del ariete hay un abanico de opciones pero aún no se ha ido decididamente a por ninguno.

En todo caso, y a falta de la guinda del pastel, el proyecto ilusiona a la gente, con un plantel equilibrado, con alternativas y con sentimiento por el escudo, así como mucha hambre de hacer grandes cosas.