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El Bádminton Rinconada cae en Oviedo en un duelo mucho más igualado de lo que reflejó el marcador final y en el que Antonio Molina se quejó mucho de la actuación arbitral
El Bádminton Rinconada cayó por un
contundente 6-1 en Oviedo, aunque el duelo en el Corredoira Arena fue mucho más
igualado de lo que reflejó el marcador final del encuentro, con cinco partidos
resueltos en tres sets y una actuación arbitral polémica, de la que se quejó
mucho el técnico rinconero, Antonio Molina. Jugar en Oviedo es siempre
complicado. El equipo ovetense, preparado para estar entre los mejores de la
competición, convierte año tras años el Corredoria Arena en un fortín
inexpugnable para los equipos que viajan hasta su feudo.
La dificultad del rival va unida a la
imposibilidad de poder contar con los extranjeros, una situación con la que el
Rinconada tiene que empezar a convivir puesto que parece que irá para largo,
pero, evidentemente, influye en el juego, pues de haber estado los ingleses del
cuadro del Fernando Martín, posiblemente el resultado hubiese sido bien
distinto.
El primer partido, los dobles mixtos, empezó
bien, con una ajustada victoria de Laura Molina y Jaume Pérez ante Alberto
Zapico y Claudia Leal, al vencer el primer set por 19-21. Sin embargo, los
locales se rehicieron para acabar sumando los dos sets siguientes por 21-13 y
21-8, adjudicándose así el partido.
A continuación, en los dobles masculinos
y femeninos, el infortunio asestó un duro golpe para los rinconeros, que
cedieron ambos encuentros en tres sets, dejando el marcador en un 3-0 que ponía
las opciones visitantes muy cuesta arriba. Las hermanas Laura y Marta Molina caían
derrotadas ante Claudia Leal y Lorena Uslé por 21-9, 13-21, 22-20, en un
apretadísimo tercer set, mientras que Jaume Pérez y Carlos Piris cedieron
también ante Javier Suárez y Alberto Zapico por 14-21, 21-15, 21-18, en otro duelo no apto
para cardíacos.
En los primeros duelos Individuales Masculino
y Femenino, Marta Calleja cedía en tres igualados juegos ante Kristina
Dzhangobekova 21-14, 17-21 y 21-7, mientras que Fran Olivares, por su parte,
caía en dos juegos ante un gran Uriel Canjura (21-5, 21-19).
Con el encuentro ya decidido para el
Bádminton Oviedo, Nerea Díaz puso el único punto para el equipo rinconero al
imponerse en dos cómodos sets a Laura Solís (19-21, 11-21), mientras que
Alberto Leal ponía el sexto punto ante Carlos Piris en otro maratoniano
encuentro que se resolvió por 19-21, 21-16 y 27-25.
Al término del
encuentro, Antonio Molina no dejaba de alabar y agradecer el trabajo de
los suyos: "Sé que ya puede sonar repetitivo pero el tema de los jugadores
extranjeros es algo que nos merma seriamente. Esta temporada habíamos perfilado
una plantilla con muy pocos errores, completa y preparada para partidos como éste,
donde sabes que los detalles por los que se va a decidir un partido van a ser
mínimos. Aún así, no puedo dejar de destacar la labor de los nuestros, partido
tras partido.
En cuanto a la actuación arbitral comenta: "Jamás utilizaré ni utilizaremos a los árbitros como una justificación, pero hoy creo que es de recibo mencionar que quizá nos hayamos visto perjudicados. En el encuentro de Dobles Femeninos, nos han arrebatado un punto que habría sido determinante para nuestras aspiraciones. Aun así, vuelvo a repetir, esto no nos va a servir de excusa respecto al resultado de hoy".