El Club Ajedrez San José acaba de escribir la página más brillante de su historia después de consumar su ascenso a División de Honor, el techo de la entidad desde sus comienzos.

El salto de categoría estaba muy bien encarrilado después de la victoria en La Rinconada en el duelo de ida por 4-0. Salvo hecatombe, el equipo tenía ya pie y medio en la máxima categoría autonómica. Y no sólo certificó la hazaña, sino que lo hizo con otro triunfo contundente por 0-4, después de las limitaciones a las que ha obligado el Covid, que reducen las eliminatorias a cuatro puntos.

Para hacernos una idea de la importancia del logro conseguido, podemos hablar del rival de los rinconeros, el Casino Primitivo de Jaén, es un club que nació en 1846, un histórico de Andalucía que lo ha ganado a nivel nacional prácticamente todo y que sucumbió, por un global de 8-0 ante el San José.

Cristian Silva, el alma de la entidad, así como Rafael Montero, Carmen Ordóñez y Antonio González, han escrito su nombre en el palmarés de la entidad con letras de oro, así como el resto de la familia del ajedrez local, con José Manuel Garrido a la cabeza, que supo recoger el guante de Joaquín Calzado, que retomó la actividad en el club y siguió creciendo hasta llegar a la cima.

Mención especial merecen los fundadores, en los años ochenta, del club. Antonio Ramírez Parrilla y Mariano Mimbrero, posiblemente, no imaginaban que ese proyecto que alumbraban en sus albores, llegaría a las cotas en las que se encuentra en la actualidad. ¡Enhorabuena a todos!