Caía la tarde en Isla Mayor ofreciendo un paisaje único como telón de fondo para el encuentro disputado en el Rafael Beca. El Villafranco salió a por todas tras el pitido inicial del partido, revolucionando la posición de los rinconeros en el campo y llegando a tener un par de ocasiones claras. Tal era la dinámica que en el minuto 12, tras un saque de esquina de los isleños, rechazó el balón la defensa del Rinconada pero lo recuperó Checa en la frontal del área, quien lo lanzó con toda la fuerza que su empeine le permitió para acabar colándolo por la escuadra derecha.

Con el 1-0 en el marcador, el Rinconada procuró cambiar las tornas y reforzar su ofensiva. Como resultado de ello, llegaron las continuas faltas tácticas del Villafranco y pérdidas de balón que eran claves a la hora de crear una jugada efectiva. Así discurrieron los siguientes 15 minutos hasta que en el 27' avanzaba Kisko por la frontal hasta que en el vértice derecho del área recibió una asistencia voleada y magistral de Mimi, provocando que Toni, el portero del Villafranco, saliese erróneamente y dejase la portería libre para recibir el balón que entró botando y anotando el empate de los blanquiazules.

Puede decirse que el 1-1 marcó un antes y un después en ambos equipos, equilibrándose la fuerza de ambos bajo la presión de que al descanso era clave irse con la ventaja. El Villafranco relajó su ofensiva y el Rinconada, en cierto modo, también procuraba mantener la calma pero con la intención de aprovechar cualquier resquicio en la defensa isleña para anotar el segundo. Justo así fue cuando en el minuto 42, David López sacó una falta desde el lateral izquierdo del área, la puso en el centro y el rechace del defensa del Villafranco acabó siendo rescatado por Paco, lanzando el balón directo a la escuadra derecha de la portería, firmando el 1-2 con el que se fueron al descanso.

Ya con la noche cerrada, la segunda parte comenzó también bastante equilibrada, con dominio del balón alternado y con predominio de jugadas cortas en el centro del campo. En una de esas jugadas, Kisko consiguió escabullirse con velocidad para dirigirse a la frontal donde se encontró prácticamente solo con el guardameta, quien no pudo hacer nada para evitar el tercer tanto que el jugador rinconero anotó y con el que prácticamente sentenció el partido en el minuto 50.

Sin embargo, ello no quiere decir que los 40 minutos restantes fueran un camino de rosas para el Rinconada. Desde el 1-3, los de Nando de la Rosa se centraron en defender la portería, atrasando y cerrando la defensa a cambio de disminuir la ofensiva, ya que tal y como se dispuso el Villafranco a partir de entonces, buscar un cuarto gol podía salir demasiado caro. Y es que los minutos desde el 70 al 80 fueron una continua lluvia de ocasiones y una exposición constante a la presión por parte del equipo local, siendo la portería rinconera una auténtica trinchera defendida de los ataques incesantes de los isleños. El avance de Calderón por la banda derecha para acabar centrando al área era una de las jugadas con las que más insistieron, pero que con poco éxito finalizaban, ya que si no eran interrumpidas por Parque en la propia banda, el balón acababa siendo rechazado de cabeza por Juanma desde dentro del área. En los últimos diez minutos, el Villafranco aminoró el ritmo pero no dejó de insistir hasta el final.

Era un partido clave para el Rinconada, que lideraba la tabla compartiendo 22 puntos con el Villafranco, por lo que conseguir la victoria en el Rafael Beca era la manera más directa de adjudicarse la primera plaza al completo, y así ha sido. Conscientes de que el Villafranco, ya de por sí, no era un rival precisamente fácil (en la primera vuelta fue 1-2 el resultado), el Rinconada era muy consciente también de que los de Isla Mayor no iban a dejar escapar su posición tan fácilmente en casa. Finalmente, el Rinconada ha demostrado su superioridad en cuanto a estrategia y a capacidad de sortear interrupciones de jugadas claves en el centro del campo, así como de adaptación a las situaciones en general sobre el césped. La ofensiva atenta y decidida en combinación con la defensa implacable tanto dentro como fuera del área de portería hacen del conjunto rinconero un equipo envidiable, y no solo por la primera plaza en la que ahora se ha reafirmado y de la que es completo merecedor, sino en todos los sentidos.

En la décimo cuarta jornada recibe al Camino Viejo CF, que llegará al Nuevo Leonardo Ramos tras la derrota ante el Camas, habiendo recibido la friolera de seis tantos a cero. Aun así, nada está firmado en el verde hasta que no finalizan los 90 minutos y no hay momento para relajarse, que la segunda vuelta no ha hecho más que comenzar. Es momento para el Rinconada de saborear la victoria y de que sirva de impulso para seguir así.

Fotografías: José María Murillo

Crónica: Esther Pérez