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Rinconada y San José empatan en un encuentro ante 400 personas en las gradas del Ramos Yerga
No defraudó el primer derbi de Juveniles
entre los dos equipos de la localidad. Rinconeros y Cañameros lo dieron todo en
un Leonardo Ramos repleto ante 400 personas, en lo que supuso una fiesta del
fútbol base de la localidad, ante la presencia de directivos, aficionados.
Desde inicio, el partido se definiría
rápidamente. Los dos conjuntos, muy temerosos y nerviosos, proponían
tímidamente pero sin gran peligro en las áreas rivales. El conjunto de Juan
Amor ponía el fútbol y los cañameros, replegados, creaban mucho peligro al
contraataque. La jugada más destacada del equipo blanquiazul recayó en las
botas de Francis, con un mano a mano que paró magistralmente Juanma, salvando a
los suyos antes del descanso.
El partido se desequilibraría al borde
del descanso. En el minuto 45, Yeray, el mejor del equipo cañamero en la noche
del sábado, clavaba una magistral falta desde el borde del área, insalvable
para el guardameta local. Con el gol, el árbitro decretaba el fin de la primera
parte, a la que se llegaba con la victoria parcial para el equipo del Felipe
del Valle.
Al comienzo de la segunda mitad, los de
Juan Amor se volcaban al ataque, intentando hilar sendas jugadas sin mayor
peligro ante un San José replegado, pero saliendo rápidamente con el balón en
sus dominios.
En el minuto 75, el asedio rinconero
encontraría su premio. Fran Parque, muy veloz, galoparía por la banda izquierda
y, tras zafarse de su defensor, conseguiría batir al guardameta visitante para
delirio de la parroquia rinconera. Inmediatamente, tras el gol local, el equipo
cañamero tuvo en sus botas la opción de réplica, al errar un pase el guardameta
local que salva magníficamente el disparo a bocajarro del delantero azulino.
A medida que iban avanzando los minutos,
los de Juan Amor ganaban líneas y confianza para poder dar la vuelta al
marcador. La más clara la tuvo al estrellar un balón al larguero en los último
compases del partido.
Finalmente, reparto de puntos entre rinconeros y cañameros en un derbi con un ambiente único. Las gradas repletas del Ramos Yerga presenciaron un encuentro único entre los dos clubes del municipio, dando toda una lección de fútbol y deportividad donde la fraternidad fue la tónica dominante. A ambos equipos les quedará por delante toda una vuelta para seguir aspirando a pelear por todo, en una temporada que se presenta ilusionante para ambos.
Iván Salgado