El Ayuntamiento de La Rinconada, a través de su área de Formación y Empleo, abre nuevas convocatorias para dos programas de becas propios, las Becas Primera Oportunidad y las Becas de Formación No Reglada.

“Programas en los que, por un lado, se da oportunidad para que estudiantes del municipio lleven a la práctica los conocimientos adquiridos en los estudios, para enriquecer aún más sus currículums logrando así un perfil competitivo y con mayor empleabilidad y, por otro lado, concedemos ayudas a personas con recursos insuficientes para realizar cursos de formación no reglada que le son necesarios para mejorar su cualificación profesional y favorecer su inclusión socio laboral”, explica la delegada de Formación y Empleo, Raquel Vega.

Becas Primera Oportunidad

Para las Becas Primera Oportunidad, las personas beneficiarias durante 6 meses realizan prácticas en servicios públicos municipales recibiendo por ello un incentivo a la formación de 400 euros/mes. Están dirigidas a estudiantes universitarios, empadronados en el municipio, con la menos unos seis meses de antigüedad. Este año, el presupuesto de estas ayudas se han incrementado un 5 por ciento. Recientemente, el alcalde, Javier Fernández, así como las delegadas de Formación y Empleo y de Recursos Humanos, Raquel Vega y Mercedes Bueno, daban la bienvenida a 15 estudiantes beneficiarios de estas becas de la anterior convocatoria que en estos momentos se encuentran realizando sus prácticas en diferentes áreas municipales.

Ayudas para la formación no reglada

Por otro lado, hasta el 31 de octubre, es posible solicitar las becas para Formación No Reglada, colaboración público-privada, para la mejora de la cualificación profesional de las personas demandantes de empleo. Las acciones susceptibles de ser becadas son aquellas conducentes a la obtención de certificado de profesionalidad, para obtención de carnet profesional, para acreditación oficial de idioma.

Las personas beneficiarias deben estar empadronadas en el municipio, mínimo de seis meses de antigüedad, y no haber comenzado la acción formativa a fecha de registro de la solicitud o que no haya transcurrido más de un 10% de duración desde el inicio de la misma. También deben estar inscritas en el DOSLA. El importe de la ayuda alcanzará el 50% del coste de la formación, con un máximo de 300 euros, en casos excepcionales y por cuestiones sociales se podrá llegar al 100%.