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Ante su público, los de David Sánchez golearon al Campana y aprovecharon el empate del Pilas en Peñaflor para certificar de forma matemática el ascenso de categoría, el primero que se celebra en el Nuevo Ramos Yerga
Es cierto que el último ascenso
del Rinconada a la entonces denominada Regional Preferente se consumó jugando
en el Nuevo Ramos Yerga. Pero el ansiado día se materializó en el Manuel
Leonardo Ventura de Pilas, gracias a un gol de Selu, en el equipo que por aquel
entonces dirigía Andrés Millán. Por lo tanto, es la primera vez que el salto de
categoría se producía jugando como local, al abrigo de su público, nueve años
después de que el coliseo abriera sus puertas.
Todo estaba preparado y a nadie
le pasaba por la cabeza otra cosa que no fuera ganarle al Campana. Los blanquiazules
sabían que estaba en su mano, después del empate del Pilas en Peñaflor por la
mañana (0-0), que dejaba a los de David Sánchez dependiendo de sí mismos para
cantar el alirón. Y lo hicieron por la vía rápida, con goles de Emma, David
Cuevas, Abel Pando y Rupe, que dejaron finiquitado el encuentro cuando se
llevaba transcurrida sola media hora. Su rival, el Campana, convidado de piedra
a la fiesta rinconera, descendido matemáticamente desde hacía varias semanas,
demasiado tenía con mantenerse en el campo. Toca agradecerles que, en su
situación, se presentaran al partido y aguantaran con dignidad los 90 minutos -porque
la colegiada Bermejo Villa no añadió ni un segundo al tiempo reglamentario-. En
la segunda mitad, con la gente entregada y a gritos de ¡Rinconada, Rinconada!,
se completó la fiesta. Tete, Molina, otra vez Cuevas y Jairo -sí, el portero,
que jugó casi toda la segunda parte como delantero centro-, redondearon un 8-0
que era lo de menos, porque lo importante comenzaba tras el pitido final.
Y es cierto que la condición del
rival hizo que el encuentro estuviera descafeinado, pero la fiesta tras el
tiempo reglamentario se vivió con la intensidad de una final de Champions,
porque no se celebraba el triunfo ante el cuadro de la Campiña sevillana, sino toda
una temporada de trabajo, esfuerzo, ilusión y fiabilidad, que acaba de dar con
el equipo en Primera andaluza. Ya no había que mirar más números ni echar más
cuentas. Ya estaba conseguido el objetivo, por mucho que los del Nuevo Ramos
Yerga quieran ser campeones y vayan a por todas en la última jornada a San Juan
para enfrentarse al Loreto. Pero el gran reto ya era matemático y eso bien
merecía una celebración.
El Rinconada ha sido el conjunto
más regular del grupo I de la Segunda Andaluza. En 33 partidos disputados ha
ganado 24, ha empatado 5 y solo ha perdido 4, dos ante el Pilas, uno ante el
Puebla y otro ante La Barrera, que ahora es líder por el
goal average particular entre ambos, pues comparten 77 puntos en la
tabla. Pero la fiabilidad del Rinconada, ha sido tremenda. Con tropiezos
contados, aunque ante rivales de enjundia pero, a pesar de que hubiesen podido
surgir dudas, este equipo siempre supo levantarse y retomar la senda del
triunfo, dejando claro que sus ideas, sus mimbres y sus sueños viraban en una
única dirección.
Por todo ello, tras el pitido
final se desató la alegría no sólo en el césped. También en las gradas, donde
ávidos aficionados celebraban la gesta, con el amargo recuerdo del no ascenso en
Hytasa hace algunos años. El fútbol se la debía al Rinconada y como el tiempo
al final termina por ser justo se la devolvió a lo grande, dejando cada cosa en
su sitio. Porque nadie de esta Segunda Andaluza duda que el equipo de David Sánchez
lo ha merecido, más que ningún otro.
Y aunque ayer era momento de
celebrar, el director deportivo, al que muchos señalan como el artífice en la
sombra de este logro -lo hacía el entrenador, David Sánchez, a través de sus
Redes Sociales- ya adelantó que hay hasta cuatro refuerzos cerrados para darle el
lustre necesario a este proyecto en Primera y tratar, así, de pelear por seguir
subiendo, porque este equipo no se para aquí y el año que viene el sueño
continúa.
Tras el duelo, el entrenador, David
Sánchez, el presidente, Manuel ‘Saldaña’, el jugador franquicia, David Cuevas,
y el alcalde, Javier Fernández, que estuvo presente animando a los rinconeros
junto al concejal de Deportes, José Manuel Romero Campos, coincidieron en el
merecimiento de este ascenso, en el gran trabajo que lleva detrás y en que
ahora toca seguir creciendo y no pararse aquí.
Pero esa será otra historia, porque este capítulo ha llegado a su fin, y lo ha hecho con final feliz. Como finaliza el técnico blanquiazul en cada comentario que comparte en Redes Sociales, sin que el de ayer fuera una excepción: “jueguen”. A lo que podríamos añadir: “y disfruten lo ganado”.