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El Bádminton Rinconada acaba segundo en la Copa Iberdrola, mientras que Laura Molina se lleva el MVP del torneo
Felicidad total en la expedición
rinconera que partía con la obligación de defender el bronce conseguido en la
pasada edición de la Copa Iberdrola de Bádminton y se vuelve con la medalla de
plata que pudo ser de oro por pequeños matices.
Laura Molina, Heather Olver,
Marta Molina, Nerea Díaz, Marta Ferreira y Lucía Merchán, se procalameron
subcampeonas de la Copa Iberdrola Femenina en el Palacio de Deportes Carolina
Marín de Huelva.
El equipo rinconero abrió la fase
previas derrotando contundentemente (4-1) a un recién ascendido a División de Honor
como es el Club Bádminton Alicante (9 veces campeón de España) que vuelve a la
máxima categoría. Seguidamente tocaba el turno contra el Club Bádminton Astures
que también cayó derrotado por un severo 5-0. Las guerreras rinconeras pasaban
a la Fase Final como primeras de grupo y se cruzaban en la ronda de cuartos de
final con el Club Bádminton Alhaurín de La Torre que casi no pudo calentar el
tapiz ya que fueron apeadas de la competición por un 3-0 y sin posibilidades de
disputar los dos restantes individuales femeninos.
En la ronda de semifinales
llegaba el turno para un equipo que esta temporada ha finalizado por encima de
los sevillanos, el Club Bádminton Arjonilla. Todo comenzó según el guion
trazado por Antonio Molina y rápidamente sumaban los dos partidos de dobles
femeninos para finalizar con un 3-1 y plantarse en la gran final.
En el tapiz colindante se
disputaba la otra semifinal entre el Recreativo IES La Orden y el Club
Bádminton Oviedo, que defendía el título conseguido en la pasada temporada. Se
tuvieron que disputar los cinco partidos para dar el triunfo a los onubenses y
reeditar la enésima final entre ambos clubes andaluces.
En la modalidad de dobles hubo reparto de puntos y todo quedaba para ser sentenciado en las modalidades de individuales. Lucía Merchán tuvo el partido en sus manos y al final cedió frente a Lucía Morán. Las siguientes en saltar a la pista fueron Marta Molina y la olímpica portuguesa Telma Santos que solo dio opciones a la sevillana en el primer juego, lo que dejó el título en manos del conjunto anfitrión, pero no restó reconocimiento a un equipo rinconero que pone un broche de oro a una temporada irregular.