Para empezar, me gustaría que nos contarais qué supone para vosotras volver al municipio de La Rinconada, hace relativamente poco compartisteis escenario con Marta Quintero, ¿qué tal os trató el público aquí?

Siempre tenemos a La Rinconada como un sitio al que volver. Ha sido grande el cariño recibido en forma de aplausos y vítores. Nos supo a poco nuestra última actuación y por ello volvemos con más ganas. Nosotras disfrutamos mucho en el escenario y queremos transmitir, tanto ese sentir, como el enorme respeto que tenemos hacia el público. Al final son ellos los que hacen al artista y se lo debemos todo.

¿Qué tenéis preparado para el show de la feria de La Rinconada?

Es un show sobre canciones que marcaron nuestra carrera y con las que disfrutamos mucho cantando. Sevillanas va a haber seguro. También queremos que nuestro público perciba algo nuevo a la hora de escucharnos. Por ello, vamos a hacer alguna que otra cosa nueva que no queremos desvelar.

Tenemos curiosidad por saber cómo habéis logrado gestionar una carrera de 30 años. Corregidme si me equivoco, pero la mayoría de los artistas sacan un par de hits y ahí se quedan.

Bueno, eso es algo que es difícil de explicar. En primer lugar, somos muy conscientes de que todas las decisiones que hemos tomado no fueron acertadas, y otras sí. Fuimos aprendiendo haciendo y equivocándonos. Las decisiones que una va tomando son las que te marcan un camino. En nuestro caso no nos arrepentimos, hemos aprendido y conocido mucho.

En cuanto a la gestión, por una parte, estamos muy contentas porque no cambiamos nuestra profesión por ninguna otra. Por otra, sabemos que no siempre se obtiene lo que uno cree que merece. Está difícil vivir de la música, vender discos y trabajar dignamente en ella. Después hay personas que no valoran todo el trabajo que la música representa y lo quieren todo gratis. Es importante seguir desarrollando el trabajo que se viene haciendo para acercar la música a la gente.

Al final queremos transmitir que, aunque a día de hoy es difícil vivir de la música, nosotras somos unas supervivientes y ahí estamos reinventándonos. Acertamos a veces y otras fallamos, pero la verdad es que nacimos reales y no perfectas. Para nosotras poner todo el amor y el respeto a esta profesión es parte del secreto que nos mantiene vivas.

Empezasteis haciendo sevillanas, ¿cómo evolucionasteis a este nuevo estilo?

Somos muy inquietas. Nos gusta investigar, escuchar otros estilos y absorber todo lo interesante que se nos pone por delante. Creemos que también es un ejercicio artístico ir con los tiempos. Eso sí, siempre con la identidad de Las Soles.

30 años de Las Soles, ¿Cuál ha sido vuestro momento más álgido?

Sin duda el año en el que grabamos la versión de la canción Vida loca de Pancho Céspedes. Nuestro amor por la canción nos llevó a incluir el tema por capricho en ese disco. Se convirtió en un boom y empezamos a cantarla en nuestros directos. Las emisoras de radio también ayudaron a que fuera un éxito e hicimos 80 conciertos en tres meses. Sinceramente surgió algo mágico con esta canción que no sabríamos explicar.

Con 17 discos en el mercado, ¿cuánta cuerda tienen Las Soles?

¡¡Uff!! Qué buena pregunta. Pues lo que sí puedo asegurarte es que seguimos con ganas de ofrecer cosas, de seguir subiéndonos a un escenario. Sentimos la piel de gallina cuando nos escuchamos bonito y al unísono, las tres juntas. No sabemos cuánta cuerda nos queda, pero mientras sintamos todo eso y el público aclame nuestra música, ahí estaremos.