El San José volvió a perder por la mínima. Idéntico resultado que el obtenido en Huelva aunque ante un rival inferior al filial del Recreativo y ante su gente. Respecto al duelo ante los onubenses hubo peligrosas coincidencias, aunque también algunas diferencias. La imagen de los de Maldonado fue mucho mejor en la primera parte y, en ambos partidos, el equipo se desfondó en el tramo final. El San José perdonó la meta rival en los dos envites y regaló atrás lo que no deja opciones de ganar ni de sumar.

El cuadro azulino salió con ganas ante el Chiclana. La falta de dibujo definido y de trabajo táctico se suplía con una presión asfixiante y con muchos balones largos a la espalda de la defensa para hacer sufrir a la veterana zaga gaditana. Mientras duró la gasolina la estrategia funcionó a los de Maldonado. Generaron ocasiones, se adelantaron en el marcador por medio de Ennoury, que suma su segundo tanto y es el único azulino en la tabla de goleadores. Pero pese al rosario de ocasiones, Cristina solo tuvo que recoger una vez el balón del fondo de las mallas. Ni varona, ni Juan, ni Lobo tras un pase de la muerte de Álvaro Lora vieron puerta. Por el contrario, los de José María Román tiraron una vez a puerta, pero Pablo Rodríguez aprovechó un error de Juan en el despeje para poner las tablas en el marcador.

En la segunda mitad, la intensidad del ataque local bajó muchos enteros, fruto de que el calor y el cansancio empezaban a hacer mella en un equipo que se había matado a correr en la primera parte. Los visitantes no exhibieron mucho más , pero aprovecharon un ataque aislado para que Crespo, tras romperle la cintura a Juan -cuyo nombre aparece en los dos goles chiclaneros-, cediera a Agus que adelantaba a su equipo, dejaba con cara de tonto al San José y, lo que es peor, sin capacidad alguna de reacción -no hubo un solo tiro a puerta con el marcador en contra-.

Al final, el San José sumó su segunda derrota, sigue sin estrenar su casillero de puntos y deja sensaciones contradictorias, aunque se le ven algunas carencias preocupantes. La próxima semana, en Torreblanca, el equipo, aunque esto no ha hecho más que empezar, jugará condicionado por la necesidad urgente de puntos… y no lo hace en la mejor plaza para ello.

El mejor en defensa: Lobo. El delantero presionó con un jabato la salida del balón, hizo buena la máxima de que la defensa en labor de todo el equipo y dificultó mucho la creación de juego de su rival.

El mejor en ataque: Ennoury. Sólo estuvo media hora en el campo -se retiró indispuesto aunque sin consecuencias para partidos venideros-, pero tuvo tiempo de hacer un gol en un balón en el que ganó la espalda a la defensa y definió con maestría ante Cristian.

Un día para olvidar: Juan. Su nombre aparece en los dos goles en contra del San José. En el primero falló estrepitosamente a la hora de despejar un balón y, en el segundo, Crespo le rompió la cintura antes de ceder a Agus para que marcara el segundo tanto gaditano.