El Rinconada recuperó el liderato de la Segunda Andaluza con el segundo triunfo de la temporada a domicilio, no en un feudo cualquiera, sino en el Rafael Beca de Isla Mayor, un territorio altamente complicado por la presión que sabe ejercer el público y el equipo rival.

Los pupilos de José Antonio Arias, que venían de empatar en casa sin goles ante el Osuna, salieron a por todas, aunque enfrente encontraron a un animoso rival que trataba de ganar complicidad con su público a base de empuje, aunque la calidad local era inferior a la de los blanquiazules.

No obstante, serían los marismeños quienes tomarían ventaja en el marcador gracias a Kevin, en el 24. Antes la habían tenido Mario y Díez, sin fortuna, y en el 29, sólo cinco minutos duró la desventaja, Molina aprovechó un error defensivo para cazar un balón y mandarlo al fondo de la red. Tablas con las que llegaría al descanso con la sensación de que e el momento que el Rinconada apretara un poco el acelerador acabaría llevándose el partido.

En la segunda parte, los locales trataron de tirar de casta para tener opciones de victoria, pero sus ilusiones se esfumaron con la expulsión de Viruta y la inferioridad numérica, que dio alas al Rinconada. Poco antes de la cartulina roja, Braulio había sustituido a Carli y fue precisamente el delantero el que iba a anotar el gol del triunfo visitante en 82.

De ahí al final lo intentaron con más corazón que cabeza los locales, que acabaron claudicando y dejando a los del Nuevo Ramos Yerga como líderes en solitario tras la derrota del Ciudad Jardín, siete días antes de recibir en La Rinconada al Algabeño.