Quizás lo mejor que se puede decir del Bádminton Rinconada es que todavía queda Liga, que tradicionalmente el equipo rinconero va de manos a más, que este año, con el cambio del sistema de competición y la vuelta de la ronda de semifinales el margen de error es más amplio, y que el cuadro rinconero contaba con importantes bajas en su estreno en el Fernando Martín. Tampoco se puede obviar el gran trabajo realizado por el equipo alicantino, que se ha encontrado con el premio del retorno al Top 8 de División de Honor y que quiere sumar cuanto antes para ganarse mantener la categoría.

No fue el debut soñado, ni mucho menos. Nadie dijo que iba a ser fácil. Cada temporada son más los equipos apuestan por su cantera, que crecen y hacen de la liga una competición más reñida temporada tras temporada. Y el Bádminton Rinconada lo ha sufrido en sus propias carnes. Decía Antonio Molina, crítico con los suyos, que “ha sido un golpe muy duro el que hemos recibido. Sabemos que somos un equipo muy joven, con falta de experiencia, pero eso no era motivo para dejar de luchar, y nos ha faltado más lucha. Creo que no hemos llegado en el estado de forma que esperábamos, y eso nos ha hecho ceder demasiados puntos”.

El encuentro ya comenzaba torcido en los Dobles Mixtos. Laura Molina y Jaume Pérez cedían ante Daniel y Helena Sánchez en un encuentro que sirvió de preludio a la igualdad que existiría durante todo el encuentro (20-22, 21-19 y 16-21).

Los dobles parecieron arreglar el desaguisado, con una notoria superioridad local. La pareja masculina, formada por Jaume Pérez y el recién llegado Carlos Piris, no dio opción a los alicantinos José Luis Martín y Alberto Perals a pesar de llegar a los tres sets (21-19, 18-21, 21.10), mientras que las hermanas Molina fueron mucho más contundentes en su marcador (21-14, 21-12).

Pero la remontada quedó en agua de borrajas con la disputa de los duelos individuales. Marta Calleja, que realizó un sobresaliente primer set aunque perdió por la mínima, se desinfló en el segundo quedándose sin opciones de disputar la victoria final ante Ana Ramírez (20-22, 12-21). Quiles, por su parte, nos daría el encuentro más vibrante de la tarde al perder en un tercer set que llegó a los 25 puntos (18-21, 21-13, 23-25) que fue la clave de la derrota rinconera.

En los primeros duelos individuales, Carlos Piris, uno de los flamantes fichajes, veía como Alberto Perals le pasaba por encima por un contundente 5-21 y 12-21. Nerea Díaz cerraba el nefasto día rinconero con otra derrota, la que ponía el quinto punto alicantino conseguido por la joven Nicol Carulla (16-21. 15-21).

Tras el encuentro, las caras del equipo rinconero lo decían todo. Molina manifestaba que “la competición post Covid nos ha venido realmente mal. Parece que tantos meses sin competir han sido devastadores para nosotros. Y finalizaba sentenciando: “Sin nuestros jugadores internacionales, va a ser muy difícil repetir la hazaña de la pasada temporada”.