Decía Nerea Ivorra en la previa del partido que “La Orden tiene cuatro puntos muy fuertes, por lo que tendremos que hacer que se conviertan en tres”. No sólo no se cumplieron las metas de la alicantina, sino que el resultado fue aun peor, ampliándose la renta visitante a una diferencia que, salvo milagro, hará que el título de capeón se quede en tierras onubenses.

Antes del comienzo del partido, el pabellón Fernando Martín era una fiesta, animada por los gritos de ánimo de cada una de las aficiones, que llenaron de colorido las gradas como la ocasión merecía. Además, el club quiso reconocer la trayectoria de su otrora capitán, Juan Manuel Fernández Quiles, que abandonaba el club mediada la temporada en busca de mayor protagonismo en Almería. En el mejor de los escenarios posibles, la presidenta, Isabel Venteo, hacía entrega al canterano rinconero de una camiseta conmemorativa y de una placa homenaje a su dilatada trayectoria en el club. Momento emotivo que tocaba la fibra de los asistentes y del protagonista del evento, que apenas pudo contener las lágrimas entre los aplausos de ambas aficiones.

Una vez empezó a volar el volante, cada uno se volcó en sus intereses y empezó a dirimirse una final que, por aquel entonces, ya conocía que el sorteo de los emparejamientos, le había salido al Rinconada lo peor que le podía salir, cruzando a Nerea Ivorra con Telma Santos y a Nerea Díaz con Laura Santos. La alicantina, todo pundonor, tenía escasas opciones ante la Olímpica portuguesa, mientras que Díaz, partía con más opciones que su adversaria, pero ya adelantaba Antonio Molina que el duelo estaría muy igualado. Por lo demás, el punto de Abián parecía claro para los onubenses, como los dobles masculinos para el Rinconada. Quine no cruzara con Abián era favorito para ganar su partido y ello dejaba los Dobles Mixtos, el primer encuentro del partido, como decisivo para el devenir del marcador final y, quien sabe, si de la final.

Tampoco hubo suerte en este partido para los locales. Laura Molina afrontó el choque aquejada de un proceso febril y con una sobrecarga laboral que en los últimos días -más bien durante toda la temporada- le ha impedido entrenarse con normalidad. No obstante, la capitana se crece en este tipo de situaciones y, con la compañía de Tom Wolfenden, que fue el mejor de los rinconeros, todo era posible. El primer set cayó del lado rinconero por la mínima, pero la ilustre dupla de La Orden, formada por Abián y Haidee Ojeda no había dicho, ni mucho menos, su última palabra. El segundo y el tercer set fueron para los visitantes (9-11 y 8-11), aunque los rinconeros pusieron las tablas al vencer en el cuarto por la mínima (11-10). Ése fue el último servicio de la tarde de Laura Molina, que se desfondó tras el esfuerzo del cuarto set y no pudo mantener la exigencia física que demandaba el partido. El quinto fue claro para los onubenses (6-11) y la capitana quedó tan tocada que tuvo que ser relevada por su hermana Marta para disputar, junto a Nerea Ivorra, los Dobles Femeninos.

Este partido cumplió el guion previsto y fue claramente para el IES La Orden por 7-11, 9-11 y 7-11, de la misma manera que Wolfenden y Jaume Pérez se impusieron a la dupla formada por Eliezer Ojeda y Víctor Martín (11-9, 11-8 y 11-9)

Viendo como estaba el partido, los de Molina empezaban a necesitar que pasara algo que pudiera romper el orden establecido. Nerea Ivorra lo intentó. A tope de moral, que no físicamente, se dejó el alma en la pista ante la Olímpica Telma Santos. La portuguesa, que tuvo que parar al final del segundo set con problemas en su rodilla, no estaba fina y la alicantina iba a darlo todo para conseguir la machada. Tras un primer set para Santos por 8-11, Ivorra ganaba el segundo 11-3. Las opciones de que la jugadora rinconera diera la campanada crecían, viendo la merma física de su oponente. Pero la raza de campeona de la portuguesa la hizo resurgir en el tercer y cuarto set para tirar de calidad, de golpes imposibles y destrozar físicamente a una Ivorra que, por mucho que corría, no podía devolver los volantes de la lusa. Al final, 6-11 y 5-11 para sellar la victoria y el tercer punto de La Orden.

Y mientras tanto, Alejandro Ramírez ganaba cómodamente el primer set (11-6), pero se complicaba la vida cediendo el segundo y el tercero (7-11 y 5-11) y mandando señales de alarma por unas molestias que arrastraba, que le hicieron jugar vendado y que dieron la cara durante el partido poniéndole muy cuesta arriba la victoria. No obstante, el sevillano tiró de orgullo y experiencia para ganar el cuarto set (11-9) y para remontar un 7-10 adverso en el quinto, en el que se terminó imponiendo 11-10 pa5ra dar el segundo punto, y un subidón de adrenalina a los suyos.

Quedaban dos partidos y el Rinconada dependía, para seguir vivo, que Nerea Díaz ganara a Laura Santos, toda vez que la empresa de derrotar a Pablo Abián, por mucho que lo intentó Carlos Piris, parecía imposible. El 3-4 hubiera permitido mayor margen a los rinconeros de cara a la vuelta, pero no fue posible. Y no lo fue porque Piris no pudo con Abián (8-11, 5-11 y 7-11) y porque Díaz hizo un partido horrible ante Laura Santos, lo que eliminó cualquier esperanza para los del Fernando Martín. El marcador final fue de 4-11, 6-11 y 8-11, dejando escapar la rinconera sendas ventajas de 3-0 en el segundo y tercer set para dejar el 2-5 definitivo.

Antonio Molina, frustrado por el resultado, calificaba de desafortunado el encuentro de los suyos ante el IES La Orden: "sabíamos que era un encuentro con unas características muy complicadas por el nivel que presenta La Orden. Además, los cruces no nos han beneficiado nada, por lo que sabíamos desde el principio que no iba a ser ni mucho menos tarea fácil".

El técnico afirmaba que "los Mixtos ha marcado mucho el encuentro. Hemos tenido varias opciones de meternos en el partido, pero no hemos logrado la solidez que esperábamos. Laura ha sufrido mucho en el encuentro y eso también nos ha pasado factura en el femenino, lo que ha hecho que perdiésemos dos puntos clave. Sin duda, es un golpe duro pero intentaremos hacerlo lo mejor posible en Huelva porque, si algo nos ha caracterizado, es la lucha y no darnos nunca por vencidos. Eso mismo hemos pensado cuando hemos visto los cruces, que han jugado un papel importante y que sin duda nos ha dejado la empresa muy, muy complicada hoy".

Los rinconeros disputarán dentro de 14 días la vuelta de la final en Huelva, en el Pabellón Andrés Estrada que a buen seguro será el que dicte sentencia en este Campeonato de España de clubes 2021/2022.