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La Unión Deportiva Rinconada cede dos puntos en la segunda jornada en un encuentro donde los rinconeros pagaron muy caro errores puntuales
El camino es largo y tedioso, pero qué importante es comenzar con buen pie una temporada que se avecina exigente y dura. El Rinconada, que ya ganó in extremis en la primera jornada, no ha podido cumplir esta condición y ha acabado consumando el primer tropiezo en la temporada, un tropiezo que no le ha permitido estrenar su casa con victoria. Bien es cierto que es un empate y que evidentemente estamos en la jornada dos, pero los síntomas son muy parecidos a los que se pudieron ver en el Ciudad de Alcalá la semana pasada.
El dominio rinconero casi siempre está ahí, pero con serias dificultades para materializar el buen hacer combinativo de un equipo que, a pesar de la pólvora que tiene arriba, no está todo lo acertado que se espera. A todo ello debemos sumarle errores puntuales en momentos donde se debe mantener la concentración competitiva, como en el primer gol visitante. El CD Pedrera se adelantó solo a los cinco minutos, confirmando el mal inicio en el encuentro para los de Raúl Carmona.
Sin embargo, los locales se repusieron rápido y solo 13 minutos después Domi Jarana volvía a acudir a su cita con el gol en una gran jugada colectiva rinconera donde Sedeño la dejó pasar para que el delantero azulino anotara su segundo tanto en dos encuentros.
Tras el gol volvimos a ver un Rinconada más reconocible, con dominio de balón y trenzando jugadas de verdadero peligro que comenzaban a inquietar la portería defendida por Fran. En el 39, al borde del descanso, David Cuevas se estrenaba en la temporada con un remate en el área pequeña para confirmar la remontada poco antes del término de la primera mitad.
Las buenas sensaciones se confirmaban y ponían remedio a un mal inicio por parte de los locales, aunque en la segunda el Rinconada volvería a las andadas. Los de Raúl Carmona volvieron a verse incapaz de retener el balón ante un Pedrera que daba un paso adelante, aunque sin lanzar campanas al vuelo. Eran sabedores de que, si abrían los espacios más de lo debido podrían llevarse el tercero rinconero, por lo que trabajaron con mesura y calma sus opciones de empate. Así, en el 65, Javi Borrego pondría las tablas en el marcador en una desaplicación defensiva rinconera, un gol que colocaba un empate que no volvería a moverse en todo el partido.
Con ello, el Rinconada cede los dos primeros puntos de la temporada y en casa. Una mala noticia que sin embargo no es un drama, pero que da buena prueba de lo que puede ser una exigente temporada donde cualquier equipo de la categoría puede darte dolor de cabeza.
Fotos: Hermi Doctor