Puertas Lago es una empresa familiar que cuenta con 35 años de experiencia en el sector de la carpintería. El promotor de este negocio fue José María Sánchez, quien paso a paso ha sabido mantenerse en el mercado e incluso ampliar sus ventas con otros tres establecimientos situados en Sevilla. Desde hace poco, las riendas de la empresa la llevan sus dos hijos Lola y Pedro, con el objetivo de innovar y ampliar sus fronteras.

En este sentido, está estudiando la posibilidad de hacerse fabricantes y adquirir para ello una nave en El Cáñamo en la que trabajarán con todo tipo de puertas. Además, según explica Lola, "queremos reforzar el comercio exterior y vender a países como Marruecos o Francia, ya que en España hay mucha competencia y es más difícil hacerse un hueco".

Pero hasta que llegue el momento de dar ese salto, continúan con su trabajo diario. Esta empresa vende puertas al por mayor y a particulares, hacen suelos laminados, armarios empotrados y cualquier tipo de reforma, en general. Lola asegura que "no sólo vendemos a nuestros clientes la puerta que les gusta sino que además se la adaptamos al espacio, e incluso reformamos lo que haga falta de la casa para que la zona de la puerta quede bien".  De hecho, una de las características de esta empresa es la fidelidad con el cliente para que quede totalmente satisfecho con el trabajo que se realiza.

Igualmente destacan la calidad de sus distribuidores oficiales: Benno, Castalla y para los suelos laminados Quick Step.