Así lo cree Rocío Márquez Pozo, propietaria del establecimiento de comida casera para llevar 'An' Cá la Tata', que acaba de obtener los permisos necesarios para poner en marcha un nuevo servicio de reparto de comida a domicilio para personas dependientes
Después de varios años estudiando y aprendiendo todo lo relacionado con el mundo de la hostelería, en septiembre de 2007, Rocío decide emprender su primera aventura empresarial junto a su madre con 'An' cá la Tata', un negocio en el que los vecinos pueden elegir entre una amplia variedad de platos caseros para llevar.
"Dicen que los mejores profesores que hay en la asignatura de la vida son nuestros padres y dado que mi madre siempre ha sido una gran cocinera, he podido aprender de primera mano todos los secretos entre fogones. A ella siempre la han conocido como la Tata, así que el nombre de la empresa está inspirado en ella", comenta la propietaria.
Una vez jubilada su madre, Rocío toma las riendas del negocio y lo va consolidando entre la ciudadanía rinconera, obteniendo una clientela fija que acude puntualmente en busca del pollo asado, los bocadillos, las hamburguesas de elaboración propia y una amplia oferta de comida casera que incluye carnes elaboradas, platos de pescados, pastas o aliños variados, entre otros.
"Con la ayuda de mi marido y del resto de empleados nos hemos hecho con una buena reputación que intentamos mantener y mejorar a través de la innovación continua de nuestros platos, vital para poder mantenerte en este tipo de negocios, adaptándonos al mismo tiempo a las circunstancias y a los tiempos difíciles que estamos atravesando", señala Rocío.
En este sentido, 'An' Cá la Tata' ha lanzado, de miércoles a sábados, nuevos menús que se adaptan al bolsillo del cliente y que incluyen un primer plato, un segundo y un postre por tan solo 3,50 euros. Además, acaban de concluir los trámites necesarios para la obtención del Registro Sanitario que les permite trabajar y cocinar comida para otros establecimientos, asociaciones y colectivos.
En palabras de la propietaria, "gracias a este permiso, válido para toda la Unión Europea, podemos elaborar propuestas gastronómicas para los comedores de colegios y guarderías u ofrecer nuestros servicios a mayor escala en grandes eventos como bodas, bautizos o comuniones". Siguiendo esta línea, la empresa ha comenzado a ofrecer la contratación mensual de menús a 4,50 euros dirigidos especialmente para las personas dependientes, ya que "creemos firmemente que éste es un sector que cada vez tiene una mayor preponderancia en la sociedad y donde podemos encontrar un nicho de mercado que aún no se ha explotado y que beneficia a ambas partes".
Así, por 140 euros al mes, los interesados en esta oferta recibirán diariamente en su domicilio un menú que consta de un primer plato, un segundo, un postre, más un plato para la cena y una pieza de pan. Asimismo, las veinte primeras personas que contraten este servicio se beneficiarán de una reducción de veinte euros durante el primer mes.
Para más información, los clientes pueden acudir a la calle Aníbal González número 4 de miércoles a domingo en horario de 12.00 a 15.30 horas y de 20.00 a 23.00 horas, o llamar al teléfono 95 473 70 85.